El hábito de morderse las uñas está estrechamente relacionado con algunas razones psicológicas, como lo son el no poder manejar de una mejor manera el nerviosismo, el miedo o la ansiedad.
Pero el llevar las uñas a la boca y arrancarlas es un problema estético para muchas mujeres, que les agrada mantener cierto nivel de belleza en sus uñas. Todo esto sin mencionar que el morderlas puede generar que las cutículas se lastimen, aparezcan heridas en los dedos o se presenten molestias con uñas demasiado cortas.
Recordemos que las uñas están en ese lugar para proteger la parte sensible de nuestros dedos.
Algunos remedios caseros para las mujeres interesadas en dejar ese mal hábito de morderse las uñas son, por ejemplo, el uso del zumo de limón.
Este cítrico es uno de los remedios más populares y eficaces, ya que el sabor ácido en la boca te hará pensar dos veces si morderte las uñas, actuando como un recordatorio
Para ponerlo en práctica, debes aplicar el limón directamente sobre las uñas, frotándolo o exprimiendo su jugo. De forma similar funciona el remedio casero del ajo.
Si tu meta es mejorar la belleza de tus uñas, puedes intentar con estos remedios caseros que se basan en impregnar las uñas con sustancias que tienen un mal sabor, con el fin de que evitemos morder las uñas frecuentemente y que hagamos consciente este hábito que antes pasaba desapercibido.
Dentro de los remedios caseros que además de causarte rechazo a morderte las uñas por su sabor trae beneficios estéticos para las mismas, es el aceite de oliva.
El procedimiento es calentar un poco de este aceite y cuando se encuentre en estado tibio debes sumergir los dedos.
Este ingrediente es muy conocido por sus beneficios para la salud. En este caso favorece la belleza de tus uñas, ya que te ofrece una hidratación completa para ellas.